Consejos para dejar de preocuparnos


La preocupación ronda en nuestras vidas, ya sea por los problemas diarios de la casa, el trabajo, o por las catástrofes naturales, el fin del mundo, etc., vivimos con miedo y preocupaciones que nos llevan a un constante estado de ansiedad y obsesión. Es difícil superar ese estado y estar relajado y vivir positivamente, pero hay algunas maneras de lograrlo, que te mostramos en VivirSalud.
No te preocupes antes de tiempo: es difícil no hacerlo, pero cuando empieces a pensar en lo que ocurrirá en el futuro intenta ponerle un freno, lo más probable es que las cosas no sean como te las imaginaste y nada sacas con preocuparte.
Mantente en el presente: muchas veces estamos haciendo algo, pero pensamos en otra cosa en realidad y empezamos a irnos más y más al futuro. Por ejemplo, estamos viendo una película, pero estamos pensando en el trabajo y nos perdimos la parte más importante. Si te vienen los pensamientos pregúntate si puedes hacer algo ahora y, si no es posible, déjalos ir. Intenta vivir el presente, al principio será difícil, pero se puede, es parte de un entrenamiento mental.
Simplifícate: intenta vivir más relajada y espontáneamente. Es muy poco lo que realmente podemos controlar en la vida y tenemos que vivirla solamente, no intentar manejar las cosas, así que debemos intentar dejar pasar las cosas y simplificar la preocupación.
Establece límites de preocupación: ve un poco de noticiario, pero no todo el día, date un tiempo en el día para pensar en todo lo que te preocupa, escríbelo incluso y ya piensa que terminaste esa tarea y concéntrate en otras cosas, ya tendrás tu “momento de preocupación diario”.

La preocupación es un mal que nosotros mismos dejamos actuar, es como nuestra mente actuando en nuestra contra, pero podemos controlarla y vivir mejor si nos lo proponemos.

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