El enojo puede matarte


Muchas veces en la vida nos enojamos hasta el punto de sentirnos con la cara roja y las palpitaciones al máximo, pero cuando esto nos pasa frecuentemente puede ser muy perjudicial para nuestra salud. La ira y otras emociones fuertes pueden desencadenar ritmos cardíacos potencialmente mortales para las personas que son especialmente vulnerables, según un nuevo estudio.

En un estudio publicado en la revista de la American College of Cardiology, los investigadores de los EE.UU. encontraron que los cambios inducidos por la ira pueden conducir a arritmias en pacientes con desfibrilador automático implantable (DAI).

Aunque investigaciones previas han mostrado un aumento en la muerte súbita cardíaca en momentos de estrés (como en terremotos y en la guerra), este estudio proporciona la primera evidencia de que los cambios provocados por la ira y otras emociones fuertes pueden predecir arritmias que pueden provocar un paro cardíaco.

"Es un estudio importante porque estamos empezando a comprender cómo la ira y otros tipos de estrés mental puede desencadenar arritmias ventriculares potencialmente letales, especialmente entre pacientes con anormalidades estructurales del corazón", dice el líder del estudio, Rachel Lampert, MD y profesor asociado de la Yale University School of Medicina.

La ira, cuando se expresa correctamente, en realidad puede tener sus beneficios. Los expertos dicen que puede ayudar a protegernos de situaciones peligrosas, nos da energía para resolver problemas, e incluso puede conducir a reformas sociales o culturales.

Si sufres muy frecuentemente de estallidos de ira y no puedes controlar tu enojo deberías ponerte a trabajar en eso y aprender a disminuirla. Métodos para controlar la ira hay muchos, pero puedes partir contando hasta 10 y realizando mucho ejercicio físico. Si estás contento, será menor la probabilidad de que estalles ante cualquier situación, ya que tu predisposición para afrontar dificultades será mucho mejor. Puedes practicar yoga o realizar alguna actividad que te relaje.

Cuídate de las rabias. A veces nos tocan situaciones que nos molestan, pero depende de nosotros cómo las enfrentamos y el efecto que dejamos que causen en nuestro estado emocional.

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